RECOMENDACIÓN DE RIEGO  CULTIVO TOMATE EN LA ZONA SUROESTE     (Desde Guia de Isora hasta Santiago del Teide)

LAS RECOMENDACIONES DE RIEGO DE TOMATE DE EXPORTACIÓN DE LA CAMPAÑA HAN TERMINADO. REANUDAREMOS EL SERVICIO A FINALES DE AGOSTO

 

Recuerde realizar una buena limpieza de su sistema de riego.

Para realizar una buena limpieza, es necesario realizar al menos 3 pasos: limpiar los finales de la manguera, realizar el tratamiento correspondiente y volver a limpiar los finales de la manguera.

·         Primer paso: Limpieza de todos los finales de mangueras. Se pone en marcha la instalación con la mayor presión posible. Lo ideal es primero abrir los tapones de las mangueras principales, luego los finales de los manguerones y por último los finales de las mangueras de los goteros. Recuerde cerrar los finales después de cada paso.

·         Segundo paso: Realizar la limpieza con ácido o con lejía (NUNCA APLICAR LOS DOS PRODUCTOS AL MISMO TIEMPO), según tengamos problemas por obturaciones químicas por precipitados de calcio o por obturaciones biológicas. Si tiene un análisis de agua, le podemos indicar que cantidad de ácido sería necesaria.

Se pone en  marcha la instalación a su presión normal y se deja en marcha hasta que se llenen todas las mangueras de la instalación, inyectando el ácido de forma que se llegue a la concentración deseada. Esto suele tardar aproximadamente 15 minutos en las instalaciones pequeñas y medianas.  Transcurrido ese tiempo, se para la instalación, dejando que el agua con el ácido o con la lejía  limpie hasta el día siguiente.

·         Tercer paso: Segunda limpieza de los finales de mangueras. Si el ácido o el cloro han hecho su trabajo, los restos de residuos de “cal” como un polvillo blanco y de algas se quedan en los finales, por lo que hay que volver a realizar una limpieza como la del primer paso.

 

Siga las siguientes recomendaciones de levantamiento de cultivo para evitar ataques de plagas en el cultivo siguiente, como la polilla del tomate.

 

Para evitar que los cultivos terminados sean un foco de plaga, existen una serie de normas para evitar que la polilla pueda infectar nuevas plantaciones, que pasamos a comentar:

ü     Una vez realizada la última recolección de tomate, se recomienda dar un tratamiento fitosanitario:

o      Si el cultivo termina con alta presencia de polilla, se debe dar un tratamiento con alguno de los productos para orugas de adulticida con un larvicida. A esta mezcla puede añadirse algún herbicida de contacto para secar el cultivo más rápido.

o      Si el cultivo termina con baja presencia de polilla y alta población de enemigos naturales, se recomienda un tratamiento con algún producto larvicida, según la intensidad del ataque.

ü     Una vez realizado el tratamiento, se debe arrancar y retirar el cultivo antes de 10 días, teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones

o      Deben retirarse todos los restos de cultivo anteriores, teniendo especial cuidado con los tomates que se quedan en el suelo.

o      Una vez retiradas del invernadero, los restos deben enterrarse o cubrirse con un plástico durante un tiempo para evitar que salgan adultos durante al menos 4 semanas. Si se van a compostar los restos, también deben cubrirse las pilas.

o      La introducción de ganado en el invernadero para el aprovechamiento de los restos de cultivo ayuda a la eliminación de huevos y larvas, incluso en los frutos que se quedan en el suelo.

o      En el caso de tener que transportar los restos de cultivo a otros lugares, deben ir tapados con una lona o malla para evitar la dispersión de la plaga.

ü     Una vez retirado el cultivo se recomienda realizar un pase de arado al invernadero, para destruir las pupas que se hayan refugiado en el suelo.

ü     En el caso de haber tenido un ataque importante en el cultivo anterior, puede ser recomendable realizar una desinfección del suelo, preferentemente con biosolarización.

ü     Deje el invernadero limpio, sin restos de cultivo o malas hierbas al menos 4 semanas. Asi evitará que la plaga sobreviva hasta la siguiente plantación

ü     Si ha tenido ataques importantes en el cultivo anterior, se recomienda, siempre que sea posible, realizar una rotación con un cultivo al que no ataque la polilla. La polilla puede atacar a cultivos de tomate, papa, berenjena y pimiento.

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