Xylella fastidiosa es una bacteria fitopatógena cuyo óptimo de crecimiento está entre los 26-28 °C. Fue descrita en 1987 en los Estados Unidos como el agente causante de la enfermedad de Pierce, que afecta a la viña. Es una bacteria muy compleja cuya capacidad infectiva depende de sus características genéticas y del hospedante. Se han identificado, principalmente, cuatro subespecies (fastidiosa, pauca, multiplex y sandyi), con un alto potencial de recombinación genética entre ellas. Esto hace que puedan aparecer nuevas cepas adaptadas a infectar nuevos hospedadores, con lo que su potencial patógeno es muy elevado. Ataca principalmente a cultivos leñosos como viña, cítricos, frutales de hueso, olivo y ornamentales, aunque infecta también, a menudo de forma asintomática, a una amplia gama de especies de plantas hospedadoras, por lo que puede pasar desapercibida.

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